He cambiado. I feel Infinte

¡HOLA A TODOS!
Ay Dios mio, estoy alteradisima.
Estoy, después de tanto tiempo, FELIZ!!
No sé como explicaroslo, voy a intentarlo, porque realmente quiero compartirlo con vosotros.
Direis: Esta tía ha fumado algo...
Pero es que acabo de ser golpeada por una realidad tan gigantesca que me ha quitado hasta la respiración.
Vereis, llevo mucho tiempo enamorada de mi Surfer. Llorando día si, día también, hasta que HOY he visto una pelicula que me ha abierto la mente.
500 days of Summer. 500 días juntos, Como queráis llamarla.
TENEIS QUE VERLA.
La realidad es esta:
Nos aferramos a las ideas que formamos en nuestra cabeza, a aquellas que queremos que pasen realmente, cuando no nos damos cuenta de que estamos dejando que otras oportunidades se vayan. La vida esta formada de momentos inesperados. Todo lo que nos pasa nunca ocurre como nos lo imaginamos. Pero eso no es motivo para deprimirnos, todo lo contrario. A veces lo que nos ocurre es mil veces mejor de lo que esperamos.
El futuro no está escrito. ¿El destino existe? Puede ser.
Pero al final si algo nos tiene que ocurrir, ocurre. Tarde o temprano lo hace.
Llevo meses enamorada sabiendo que él nunca sería mío. Con el pensamiento de que si no era el el que me quisiese, no lo haría nadie más.
Estaba ciega.
Lo mejor es dejarse llevar y ser feliz.
Si no es mi Surfer, es porque merezco a alguien mejor.
Ya aparecerá, no tengo prisa.
Soy feliz tal y como estoy.
Dios mio pensareis que estoy loca con este ataque que acabo de tener escribiendo una entrada simplemente para esta tontería, pero es que necesitaba comunicarla.
Soy feliz.
Llevo casi todo un año deprimida llorando.
Hace meses estaba sentada en mi cama cortándome las muñecas para sentir otro dolor que no fuese aquel puñal que se clavaba en mi corazón día a día, preguntándome por qué vivía, por qué no podía darle mi vida a alguno de esos niños con cáncer que seguro que la disfrutarían mas que yo.
Ahora estoy sentada en mi cama llorando pero esta vez sin una cuchilla en la mano y con una sonrisa en los labios. Después de casi un año puedo volver a decir aquella frase que tanto me gustaba decir, después de tantos años me siento así.
Me siento infinita